En Mediación, la Conflictología es la Ciencia que analiza y estudia los Conflictos, aportando herramientas indispensables para nuestro proceder diario.
Conocer estas herramientas y aprender a aplicarlas, va a suponer un cambio sustancial en nuestras vidas, y en las de aquellos con los que nos relacionamos.
Comencemos por definir qué es un Conflicto:
- Conflicto es aquella situación en la que, dos o mas partes, se encuentran por defender sus intereses y necesidades, con la creencia (errónea)de que no conseguirán sus propósitos sin perjudicar a la otra parte.
Cuando entramos en conflicto, se producen tres etapas:
1- Etapa de Escalada: Desencadenantes del conflicto, donde se genera tensión al ser conscientes las partes de sus incompatibilidades.
2- Etapa de Estancamiento: Condicionada a los objetivos, intereses, logros, poder, miedo, normas, estilo de gestión de las partes...
3- Etapa de Desescalada: Efectos que presenta la gestión de este conflicto.
Del estilo de Gestión de Conflictos de ambas partes, dependerá el resultado final.
Mas veces de las que nos gustaría, se llega a la etapa final personalizando el conflicto. Esto ocurre cuando no se es capaz de llegar a un acuerdo en el que ambas partes cedan algo, para conseguir ganar las dos, que es el resultado mas aconsejable y óptimo.
Cuando una de las partes, o ambas, están incapacitadas para llegar a ese acuerdo beneficioso, se intenta manipular al otro/os personalizando en ellos la razón de ese conflicto, aludiendo a la PERSONA, y no al problema en sí. Esto es un grave error que no conduce a ningún resultado deseable. Se pierde siempre, se aleja y destruye la relación con esa persona que, muchas veces, es de nuestro entorno mas cercano, y con la que ya no volveremos a compartir desde la confianza, amor o amistad.
Tener estas consecuencias presentes, nos van a ayudar a buscar una mejor solución, en la que se resuelva el conflicto, sin dañar la relación. Es lo que en Conflictología llamamos WIN-WIN, o GANAR-GANAR.
La propia autoestima, la asertividad, la gestión de las emociones, tiene mucho que ver en este Ganar-Ganar.
A la hora de plantear una cuestión que sentimos nos está perjudicando, y que creemos que en la otra parte podemos encontrar un acuerdo mutuo para solucionarlo, es crucial tener nuestro OBJETIVO DEFINIDO, no perder ese objetivo nunca de vista, incluso cuando aún sintamos que está lejos de ser alcanzado porque la otra parte aun no es consciente de lo que ocurre.
Demos tiempo y espacio, respetando al otro y su procesamiento de este conflicto, demos esa oportunidad y volvamos a plantearlo, siempre desde la seguridad de que lo que pretendemos conseguir va a beneficiar la relación.
Aquí hablo de conflictos personales, con personas allegadas, de nuestro entorno mas cercano, pero ocurre por supuesto, en cualquier ámbito, cómo no el LABORAL.
Igualmente se necesitan esas Herramientas en Gestión de Conflictos, para llevar a cabo una excelente NEGOCIACIÓN, y salir airosos.
3 Cuestiones a tener en cuenta:
1- INTERESES
2- NECESIDADES
3- EMOCIONES
Cuestiones que se presentarán en las partes en conflicto, y que hay que objetivarlas, tenerlas presentes, pues van a decidir si el resultado final es el deseado o no.
Quiero distinguir aquí entre dos maneras distintas de salir de un Conflicto:
Una es: Resolviendo el conflicto.
La otra es: Gestionando el conflicto
Puede parecer lo mismo pero es exactamente lo contrario.
Veamos:
Cuando resolvemos un conflicto, es porque lo damos por terminado, CONCLUIDO.
Y ésto podemos hacerlo retirándonos: decidimos NO ENTRAR EN ESE CONFLICTO, con lo cual, aunque al principio sintamos que "es mejor asi" para evitar enfrentamientos, se nos va quedando en la recámara un sentimiento de injusticia hacia nosotros, se generan resentimientos que mas adelante cobrarán mas fuerza, y que puede que al explotar, el conflicto que se genere esté lleno de culpas que echar a la otra parte, PERSONALIZANDO la desavenencia, y sencillamente se nos vaya de las manos.
En este modelo, podemos observar como no se produce el GANAR - GANAR, sino el YO PIERDO-TU GANAS: me retiro, no entro ahí porque no sé cómo vamos a salir. Doy mas importancia a tus necesidades que a las mias, me interesa mas seguir teniendo buena relación que atender mis necesidades.
No es aconsejable por su trascendencia, como he dicho antes. Y por supuesto que esto no es gestionar un conflicto, sino apartarlo, negarlo, ocultarlo de una forma u otra, pero prevalece en nuestro subconsciente, y tarde o temprano saldrá, mas cargado de energía negativa de lo que está ahora mismo, que es su momento óptimo para GESTIONARLO.
Gestionar un conflicto, por lo tanto, es hacerle frente, plantearlo sin culpas hacia el otro, con buena COMUNICACIÓN, para que quede claro y conciso y, así, darle a la otra parte la oportunidad de ser consciente de lo que ocurre, de nuestras necesidades, y plantear una solución que beneficie a los dos, con el resultado de obtener una relación mas reforzada desde el respeto mutuo, la consideración mutua y la generosidad.
Aprender estas habilidades no es difícil, solo hay que ser conscientes de cómo solemos actuar ante un Conflicto, ser humildes para reconocer lo que nos falta por aprender, aprenderlo y aplicarlo.
Merche C. Servellera
Mediadora
y COPAR.
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